Por hablar «demasiado»

La revista cultural electrónica Dosdoce cumple su primer su aniversario en la red. Especializada en Comunicación, Arte y Literatura, Dosdoce incluye en su último número un interesante artículo de Mercè Molist titulado «Aumentan los despidos por hablar demasiado en el weblog».

5 thoughts on “Por hablar «demasiado»

  1. Cinco Dias también se hacía eco de la noticia la semana pasada.
    Yo creo que los motivos de los despidos no son tanto por tener un blog y perder tu tiempo de trabajo en actualizarlo sino por la menos llamativa y atemporal cuestión de tocarle las narices a los jefes.
    Si encima en tu pagina cuentas el secreto de la Coca-cola o qué le hace tu jefe a su querida en su despacho… pues ya estás mandando curriculums como un loco.

  2. Yo también vi esta noticia y la he comentado en mi propio blog. Lo cierto es que todos hemos leído algún blog donde se pone a «parir» a alguien, dando datos demasiado precisos; donde se habla de una empresa contando cosas que no deberían ser contadas.. es decir, que también hay que pensar en lo que decimos en los blogs porque no sólo puede afectar a tu propia vida o imagen (que al fin y al cabo decidimos cada uno por nosotros mismos) sino que también puede afectar a otras personas… especialmente según la posición que tengamos en esa empresa. Ahora bien, exagerado para mí es echar a alguien por ser demasiado irónico en sus apreciaciones sobre la gente. Eso, que me perdonen, me parece fuera de lugar.

  3. si pero hay que tener en cuenta que lo brillante de los blogs es su absoluta apertura, cualquiera puede tener uno independientemente de su intención de uso (queréis pruebas pues entrar en «http://www.livejournal.com/users/bakala007/» y veréis, es uno de mis favoritos) por lo que la objetividad delos hecho es bastante cuestionable, por ello coincido en que si a la libertad de expresión la confundimos con la libertad de manipulación… pues apaga y vamonos.
    Cada dia desayuno junto a gente de mi empresa y veo las cientos de formas en las que se opina de la compañía dependiendo del estado de animo puntual de la persona, pues bien, una cosa es una barra de bar y otra muy distinta vomitar sobre el teclado tus paranoias y atacar sin contrastar. Que en este pais se lleva mucho lo de «difama que algo queda».
    No me deis las gracias por el link, se que en el fondo TODOS lo habeis añadido a favoritos… ;-D

  4. Hola
    Creo que fue Voltaire quien dijo que «no comparto su opinión pero moriría por su derecho a expresarla». Voltaire no era ejecutivo de ninguna multinacional, creo.
    Experiencia personal…
    Durante 8 años no dejé de hacer el trabajo en mi empresa. Y de hacerlo lo mejor posible, como algo propio. Sales de casa a las 6.20 y regresas 14 o 15 horas después. Al principio llegué a trabajar, por no dejarlo todo colgado, alguna jornada de 25 horas. Trabajador bien valorado y con un buen sueldo. Y un trabajo que me gustaba. Hasta ahí vamos bien.
    Eso sí, ayudaba económicamente al comité de empresa con una pequeñisima parte de mi nómina, les informaba de casos flagrantes de falta de respeto y nunca permití que ningún directivo se saltara las normas de respeto en lo que a mí respecta, etc. Es decir, quise que me trataran como una persona. Siempre. Y a los que dependían de mí, también.
    Hoy, y son hechos objetivos, tengo dos excompañeros con depresión. Uno fue »eliminado»con 52 años tras una primera baja por este motivo, y con depresión sigue. Otro está en tratamiento médico; otro está muerto. La última vez que le ví le ayudaba en su trabajo en una penúltima jornada que no la igualan ni los niños que cosen zapatillas en la India y su corazón, con 30 años, dijo stop, con la «fortuna» -para la empresa- de que le dió el infarto en casa. Ante nuestra intención de llevar a cabo una denuncia, se collaron las tuercas contra todos los firmantes de una nota, diciendo que si iba el tema a magistratura rodarían cabezas. Algunos dijimos que no nos importaba, otros pensaron demasiado en el apego a lo material y se rajaron. En el almacén de esa empresa se trabajaba, a veces, con 10º de temperatura, con goteras, algo digno de ver. Ahora mismo no queda casi nadie de los compañeros que tenía hace años en mi dpto, los subrogaron y otros se fueron, aunque queda alguno calvo por estrés, y cosas similares….
    Y lo que sí hay ahora es mucho, muchísimo «outsourcing». Este puto anglicismo es el eufemismo (más que traducción) de subcontratación, un mal endémico en este país. En la construcción mata a mucha gente, y esto tampoco es una impresión personal de un paranoico.
    Tal vez esto sea un estado de ánimo según la opinión de algunos (aún así la respeto aunque no la comparta).
    Mi ex-empresa no es un penal ni la legión ni construiamos pirámides. Es una multinacional que se precia de ser adelantada en todos los sentidos, ubicada en Barcelona y dedicada a las nuevas tecnologías. Hay mucha corbata, que opino que comprime demasiado las arterias que llevan la sangre al cerebro.
    Estoy en el paro, tranquilamente. Como no había motivo objetivo de despido recibí la satisfacción de salir de allí con dinero en el bolsillo.
    A que viene toda esta historia? Pues que a mí no me hizo falta escribir nada en un blog. Simplemente era un buen currante pero que TOCABA LAS NARICES.
    Podría relatar un rosario de salvajadas por parte de directivos que levantan 8, 9, 10 y más millones al año. Y escribo esto en un blog y pienso que no puedo decir el nombre porque iba a acabar de abogados.
    ¿llamarías a ésto, metamike, «vomitar sobre el teclado tus paranoias»? No es nada personal, pero te aseguro que no tengo ninguna paranoia, máxime cuando mi estado de ánimo es fabuloso porque tengo una edad y conocimientos que me permitirán encontrar trabajo y la indemnización me permite vivir bien. Yo diría que una opinión tras 22 años de currar mucho, 8 de ellos en la empresa que no cito, pasado un año vista ya de mi despido y sin rencor (me fui con una sonrisa, de verdad) no es algo que pueda llamarse «vomitar paranoias». La libertad de expresión es algo más. Expresar tu opinión sobre tu empresa, es algo que puedes hacer. Si no tienes razón te vas a la calle, y si la tienes… también. Vaya…
    También pienso que si escribo que Mercadona, Dia y otra empresa que no recuerdo cual es, siguen sin etiquetar en catalán, como marca la ley, y que tengo que tomar medidas para que la ley se respete, y eso lo digo través de un blog o un email, igual me echan la puerta abajo mañana 20 geos venidos de Madrid, se me llevan el pc y me fastidian bien fastidado acusándome de terrorista. Aunque esto sí es una paranoia enorme, porque eso no puede llegar a suceder en una democracia.
    Digo yo…

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