Estrechando lazos con los indignados de Atenas

Un comunicado conjunto de las plazas Sol y Syntagma, de Atenas, invita desde ayer a la ciudadanía a rebelarse contra lo que consideran “ataques de los mercados financieros hacia las deudas soberanas”. Los acusa de chantajear a “gobiernos cobardes” y “secuestrar Parlamentos”. Justo ayer, Alba Ruiz enviaba desde la capital griega a esta «corresponsalía» la siguiente entrevista a Katerina Sergidu, activista política de 29 años que pertenece a la denominada “generación de los 700 euros”. Tras pasar 45 días seguidos en la plaza de Syntagma al inicio del movimiento de los “aganaktisméni” o indignados, Sergidu se prepara para la manifestación prevista el próximo sábado día 3, la primera de un otoño que se prevé muy intenso. (La imagen pertenece a un blog que recoge impactantes imágenes de la acción policial contra los manifestantes, recomendado por Sergidu. Asegura que los comentarios son en clave de humor… pero en griego).

Alba Ruiz, Atenas  Tras el parón veraniego, cuando la Policía, en colaboración con el Ayuntamiento de Atenas, expulsó a la poca gente que quedaba acampada en la plaza de Syntagma e impidió nuevas ocupaciones, los aganaktisméni ultiman el calendario para sus próximas acciones. Esta semana habrá asambleas en los barrios y para el 3 de septiembre se ha convocado una “gigantesca manifestación”.

Justo una semana después, el sábado 10, arrancará una marcha de indignados hacia Salónica, con motivo de la feria internacional que cada año se celebra en esta ciudad. Para ello, se usarán todos los medios disponibles -trenes, autocares y coches-. El objetivo es protestar durante la intervención que tradicionalmente hace el primer ministro durante esta feria. Ese día, además, tiene especial relevancia política, porque se anuncian los presupuestos generales del país, recuerda la activista Katerina Sergidu, de 29 años. Esta joven, que acampó durante 45 días seguidos en Syntagma, pertenece a la generación conocida como la de “los 700 euros”, la cantidad que suelen cobrar de media como salario los jóvenes griegos. No es de extrañar que los universitarios helenos vean el futuro negro y emigren cada vez más. Su perspectiva ha empeorado tras conocerse los futuros recortes que afectan a la enseñanza superior. Las universidades, explica Sergidu, anuncian movilizaciones inmediatas. Por este motivo, han pospuesto el inicio de los exámenes este mes de septiembre. Profesores y estudiantes también protestan contra los nuevos decretos-ley aprobados en verano. Estos han abolido, entre otros, el asilo universitario. Hasta ahora, quienes se hallaban dentro de las universidades gozaban de inmunidad. La Policía tenía vedada la entrada a estos centros en caso de desórdenes públicos y protestas. Ahora, con la excusa de que los subversivos se esconden en las facultades, pueden entrar, practicar detenciones y sacar al alumnado de las aulas. ¿Cuáles son las nuevas estrategias y acciones previstas por los indignados de Syntagma? La Asamblea General celebrada entre el 9 y el 10 de julio, con representantes de las 50 concentraciones de toda Grecia, debatió cómo continuar las protestas con más organización y mayor colaboración el movimiento obrero. Entre las decisiones que se adoptaron, destaca la de convocar una manifestación masiva para el próximo día 3. En esa misma fecha, en 1843, Grecia obtuvo su primera Constitución. Nuestra intención ahora es pedir que se respete la actual: “Justicia e igualdad para todos”, derecho a la educación gratuita para todos los niños y jóvenes, y derecho a una vida digna. Durante las jornadas de protesta del 28 y 29 de junio, todo el mundo fue testigo del caos vivido en Atenas: protestas, heridos, robos, etc. ¿Qué sucedió realmente? La Policía llevó a cabo la más salvaje represión contra las protestas. Mujeres, niños y ancianos fueron golpeados con brutalidad, al igual que sindicalistas y personas de renombre que lucharon en la revuelta de la Politécnica de Atenas en 1973. El objetivo era acabar con la manifestación. El gobierno tuvo que fortificar la ciudad para poder votar el Memorando número 2 -segundo paquete de medidas-, para lo que organizó una movilización histórica de las fuerzas del orden en todo el país. Hay documentos fílmicos en los que se ve la acción de agentes infiltrados saliendo de las filas de la policía para provocar el caos. El hecho es que durante esos días, la plaza no se vació nunca. Se formaron cadenas humanas para resistir el ataque. ¿Cómo han afectado esas imágenes de violencia al flujo de turistas en Atenas? Durante la acampada, muchos turistas venían a la plaza a expresar su solidaridad con el movimiento de los indignados. La responsabilidad absoluta de lo ocurrido los días 28 y 29 de junio pesa sobre el gobierno y la Policía, así se estableció durante la Asamblea General. Aún nos preguntamos por qué razón la Policía llegó hasta los lugares más turísticos de Atenas -Plaka, Monasteraki- rociando con gases lacrimógenos la zona y haciendo que los turistas desprevenidos que hacían sus compras vivieran momentos verdaderamente vergonzosos para el turismo nacional. Y todo esto, a pocos metros del Partenón. ¿Qué opinas sobre el voto logrado por el gobierno socialista (PASOK) para aprobar el Memorando 2 o segundo paquete de reformas? El gobierno logró sacarlo adelante con dificultad, con solo 155 votos a favor. Muchos parlamentarios del PASOK han declarado que no se debe dar por sentado que vayan a apoyar los planes del Gobierno. No creo que sea una victoria para el gobierno de Papandreu. Es, simplemente, una prórroga. Creo que va a resultarle muy complicado aplicar las medidas de austeridad. Somos miles los que estamos dispuestos a defender nuestras escuelas, nuestras universidades, nuestros hospitales. El lema que gritamos y que puede leerse en pósters, banderas y pegatinas es: “No debemos, no vendemos, no pagamos”. ¿Cuáles son ahora los objetivos del movimiento? Tenemos dos frentes. Primero, las privatizaciones. Segundo, las reformas universitarias. Defenderemos el agua, la luz, las islas, los puertos, ¡la vida! Inspirados en el movimiento español 15-M, estamos preparando un movimiento antidesahucios. Tendremos una oleada cuando en diciembre se acabe el plazo que el gobierno ha fijado para que se empiecen a ejecutar. ¿Cuál ha sido tu experiencia personal como participante en el movimiento de Syntagma? Quienes hemos vivido el movimiento de la Plaza, no seremos ya los mismos. Salimos de casa, nos acercamos el uno al otro, nos dimos cuenta de nuestra fuerza. Es conmovedor ver al ciudadano más humilde, a gente sencilla, en un movimiento así, sin miedo, ofreciendo voluntariamente su tiempo, su esfuerzo. Verlos pasar horas y horas en la Plaza con sus familias, con los niños… Creo que venceremos, porque no hay otra salida. ¿Qué opinas del papel de Europa? Europa sabe que la crisis griega influye en las economías de los países más débiles de la Unión. El argumento de los europeos es el mismo del gobierno: que el pueblo griego debe sacrificarse para que el país no caiga en la bancarrota. Es un dilema que no nos concierne. Los trabajadores ya estamos en bancarrota, al igual que el sistema económico. La deuda no es nuestra y nos negamos a pagarla. Muchos soñamos con otro sistema político, económico y social centrado en el hombre y no en la ganancia y el capital. Por último, queremos para dar las gracias a este espacio por permitirnos expresar nuestra opinión y tener voz en el extranjero. Aprovechamos para llamar a los lectores a resistir en sus países.