El Gobierno prima la rentabilidad a la sostenibilidad

Dos meses después de que el Gobierno proclamara a bombo y platillo las presuntas bondades de la Ley de Sostenibilidad Económica, la empresa pública Renfe anunció ayer que cambiará de modelo para evitar pérdidas. El presidente de la compañía, Teófilo Serrano, explicó ayer que pretende suprimir los trayectos que no sean rentables. Así que la alternativa para los habitantes de las localidades afectadas, que verán cómo el tren pasa de largo o sencillamente desaparece de sus vías y convierte las estaciones en bellos edificios fantasma, es usar el coche. Sostenibilidad, poca. Coherencia, menos.